Jessica Cediel otra vez se pegó una chillada por su terrible caso de biopolímeros
La presentadora colombiana Jessica Cediel enfrenta desde hace años una dura prueba a causa de unos biopolímeros en su cola que afectaron gravemente su salud y por los cuales ha tenido que someterse a constantes cirugías para extraer ese ‘veneno’ de sus glúteos.
En las últimas horas publicó unas historias en Instagram que alarmaron a sus seguidores pues aparecía en una camilla, llorando y dando palabras de aliento a personas que enfrentan dificultades para que no se dejen derrumbar y salgan adelante.
“Hay gente que cree que porque uno es figura pública todo es color de rosa y todo tiene que ser perfecto (…) las redes sociales sirven para mostrarle al mundo, estoy contigo, a mí también me pasa, también he tenido momentos de prueba y me parece muy bonito compartirlo, tenemos que pasar por momentos difíciles pero independientemente nos levantamos”, dice en sus publicaciones.
Recibió apoyo de la mayoría de sus seguidores, sin embargo, también fue criticada por otros por usar las redes sociales constantemente para mostrar su llanto.
Por ello, Cediel nuevamente grabó un video en el que dejó en claro que cuando expresa sus sentimientos a través de redes sociales, lo hace para mostrar a otras personas que están pasando por su misma situación que no están solas. “Soy una mujer que siente, ríe y llora, pero respirando profundo el show debe continuar”, expresó y contestó molesta a aquellos que la critican.
“Lloro por el tema de los biopolímeros, no es fácil esto, quedan muchas secuelas físicas y psicológicas y digo que ojalá nunca ninguno de ustedes tenga que pasar por esa situación, es una pesadilla. Y así como yo lloro hay muchas otras que están afectadas por esta situación”, agregó.
La modelo colombiana pidió respeto hacia las mujeres que han vivido este problema con los biopolímeros. “Entiendan un poquito y tengan respeto por quienes vivimos esto. Ojalá nunca tengan que pasar por una situación así”.
Hace unos días, la presentadora dijo que debía convivir con ese mal de por vida "a no ser que sea con una amputación total de la zona, algo que sería demasiado fuerte" y admitió no estar preparada para eso si tuviera que hacerlo.