‘Yo soy Betty, la fea’ continúa conquistando a miles de colombianos cada noche. La repetición de la famosa telenovela ha traído recuerdos, momentos divertidos y escenas épicas que marcaron la historia de la televisión nacional.
Aunque los personajes de este proyecto se quedarán por siempre en la memoria de millones de televidentes por las peculiares características que tenían, algunos de los actores que participaron en la producción se vieron afectados de cierta forma por estos detalles.
Este es el caso de Martha Isabel Bolaños, la intérprete de ‘La Pupuchurra’, que terminó viviendo dificultades en su vida por la personalidad y actitud que tenía este personaje en la historia. Muchos de los televidentes no lograron diferenciar entre ambas mujeres.
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Según relató la actriz colombiana durante una entrevista con ‘La Movida’, a pesar de que tiene varios pretendientes, muchos de ellos la confunden con la ficción de ‘Betty, la fea’ y no separan al papel de la realidad.
Bolaños indicó que esta situación no es nueva, pues desde que transmitieron la telenovela hace 20 años, ha tenido que lidiar una y otra vez con este comportamiento de algunos hombres. Los interesados en conocerla terminaban pensando que ella era similar a ‘La Pupuchurra’.
“Se me acercaban porque pensaban que yo era como ‘La Pupuchurra’. Hoy en día sigue siendo así; la gente se estrella un poco. No me interesa porque yo no soy así y siempre he sabido cuidarme y protegerme de los ‘chulos’”, aseguró la artista, que también participó en la obra de teatro de ‘Betty’.
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Martha Isabel indicó que a raíz de la influencia de este papel, la encasillaron y tuvo que afrontar diversos retos en los medios, pues quedó con la imagen de la mujer ‘coqueta’ y ‘sexy’, y terminó en distintos proyectos con papeles similares.
Como se ha vuelto a ver en las noches del Canal RCN, ‘La Pupuchurra’ fue la culpable de que el matrimonio de Sofía y ‘el cheque’ se deshiciera, además de calentarle el oído a Fredy y hacerlo discutir con Aura María.
Sin embargo, la actriz se siente orgullosa de su sabor y las curvas que le dio la vida, porque supo aprovecharlas bien al momento de interpretar a sus personajes.