Este martes inició una nueva cuarentena en tres localidades de Bogotá (Suba, Engativá y Usaquén), las cuales tienen en conjunto alrededor de dos millones de habitantes y en las últimas semanas han registrado una alta tasa de contagios de covid-19.
El alcalde de Usaquén y quien también está encargado de Suba, Jaime Vargas Vives, expuso en diálogo con La FM cómo se ha dado el inicio de este nuevo confinamiento focalizado en su localidad y los preparativos de operativos y logística para garantizar que los ciudadanos acaten las medidas de bioseguridad.
“En primera instancia vamos a tener activos varios centros de control que servirán para disuadir y detectar las razones por las que la gente se está movilizando dentro y fuera de la localidad, gracias a la presencia del Ejército y la Policía”, afirmó.
Además, explicó que habrá cerca de 1.000 unidades de Policía y 200 de Ejército haciendo el acompañamiento en las tres localidades que estarán en cuarentena hasta el 18 de enero. “En Usaquén vamos a tener cuatro puestos de control, donde se hará vigilancia en los puntos claves donde se generan aglomeraciones”.
En el mismo sentido, Vargas señaló que se estará realizando un trabajo de pedagogía junto con la aplicación de pruebas covid y otras actividades para que la ciudadanía no salga a la calle y cumpla los protocolos de seguridad.
Entrevista al alcalde de Usaquén en La FM
El alcalde también aprovechó para hacer un llamado a la calma a los comerciantes y les recordó que se trata de 14 días de confinamiento, no algo permanente.
"Si cumplimos poco a poco podremos irnos reactivando con el piloto 'Bogotá Cielo Abierto', que seguirá después de la cuarentena estricta. Por ahora pueden trabajar mediante domicilios", agregó.
Finalmente, Vargas explicó que se repartirán ayudas humanitarias, gracias al trabajo conjunto de las alcaldías locales y desde el Distrito, para que los puntos más críticos de estas localidades puedan resistir los 14 días de pausa económica.