Desde las 5:00 a. m. y en jornadas de hasta 12 horas, así son las operaciones de los pilotos y demás personal que apoya la extinción de incendios en Helistar. Es una empresa privada cuya labor ha resultado crucial durante el Fenómeno de El Niño.
Una vez la tripulación llega a pista, lo primero que hace es preparar las máquinas, confirmar la programación del día y hacer un análisis de riesgos. También se revisa el tanque que generalmente lleva combustible para unas dos horas.
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Algo de no menor importancia es la revisión del gancho de carga, cuya capacidad es de hasta cuatro toneladas. Posterior a ello, se establece comunicación con la Fuerza Armada y la Policía.
“Llaman y nos dicen si en este momento podemos comenzar, por condiciones de tiempo y viento y nos dan las coordenadas donde tenemos que llegar”, explicó a RCN Radio el capitán, Luis Quevedo.
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Referente a las dificultades que en tiempo real se han encontrado los pilotos, Quevedo destacó: “La temperatura y los vientos. Estos nos limitan y restringen mucho la operación (…). Entrando y recogiendo agua en una represa muy fácilmente nos puede dar vértigo (…) por eso hay que tener puntos de chequeo”.
RCN Radio también conversó con el capitán, Carlos Baquero, quien esta tarde acababa de llegar de Sopó (uno de los puntos críticos durante los últimos días). Según comentó, este miércoles se hicieron 36 descargas de agua.
“Volamos ayer como cinco horas, hoy como cuatro (…). Hubo una diferencia importante y es que conseguimos una laguna que se pudo adaptar para sacar el agua”, comentó Baquero.
El Ministerio de Ambiente informó que, hasta el mediodía de este miércoles, había activos tres incendios, siete controlados y 436 liquidados entre el 1 y 31 de enero. Esto, previo a que se reactivara un foco en el cerro El Cable de Bogotá.
Previamente; la encargada de esa cartera, Susana Muhamad, afirmó que se continuaban articulando acciones con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) a fin de desplegar recursos.