De acuerdo con la investigación de la Fiscalía, la víctima permaneció en compañía de otros tres policías en un establecimiento público nocturno de la zona, hasta las tres de la madrugada. Posteriormente, caminaron hasta el parqueadero en el que permanecían las motocicletas y condujeron en caravana hasta la avenida Suba, en la que se dispersaron.

Los amigos del patrullero, pensaron que este se dirigiría hasta la localidad de Bosa, donde residía. Sin embargo, los registros de las cámaras de seguridad lo ubicaron nuevamente sobre las 4:04 minutos de la mañana en un hotel llamado ‘El Ascensor’, ubicado sobre la carrera 14 con calle 61.

De acuerdo con el testimonio de la administradora del establecimiento, la víctima preguntó por una habitación, pero no habían disponibles por el momento. Tras obtener una respuesta negativa, pasó la calle y se ubicó en el lugar conocido como ‘la olla’, por el expendio de estupefacientes.

En el edificio también funciona supuestamente un hotel; la víctima ingresó -aparentemente- buscando una mujer y, en medio de hechos confusos, fue asesinado.

Según el dictamen del Instituto Nacional de Medicina Legal, la muerte se produjo tras múltiples lesiones que afectaron uno de sus pulmones y parte del cerebro además, de asfixia mecánica. 

El dispositivo de GPS del celular, lo situó en ese lugar y posteriormente, sobre las 5:07 minutos, el equipo móvil pierde el registro de su ubicación.

Sobre las 6:00 de la mañana sacan el cadáver del edificio, cubierto de una sábana y una cobija y lo dejan sobre la acera. La administradora del hotel observó la escena y llamó inmediatamente a la Policía, que sobre las 6:05 de la mañana llegó al lugar.

Las autoridades encuentran las huellas de sangre de la víctima, que conducen al quito piso de la reconocida ‘olla’. Al ingresar hallan en el piso el casco del patrullero y una chaqueta de color café, entre otros elementos que son fotografiados.

Mientras se solicita la orden de allanamiento se registra el incendio estructural en el piso en el que habría sido asesinado el uniformado.

No obstante, se logró adelantar una verificación del lugar, encontrando en el ático de la estructura la pistola de la víctima, que había sido supuestamente escondida. También se halló su casco y la chaqueta, que fueron recopilados en la cadena de custodia de la escena. 

La motocicleta

Los videos de las cámaras de seguridad de la zona permitieron determinar que una vez se llevó a cabo el levantamiento del cadáver, Wilmer Alexander Acosta Rondón, conocido como ‘Caracas’, la trasladó a un parqueadero ubicado a 300 metros del 'polémico edificio'.

La Fiscalía también descubrió durante la audiencia la importancia del joven de 21 años, quien según varios testigos habría asesinado al uniformado.

Alias ‘Caracas’ expendía bazuco y utilizaba a habitantes de la calle para que durante el día recorrieran las calles vendiendo los alucinógenos; en la noche les suministraban algunas dosis y les permitían dormir en los últimos pisos del edificio.

Precisamente, fueron algunos de los residentes del lugar los que contaron a las autoridades lo que ocurrió esa madrugada.

Se conoció que en un vídeo quedó grabado alias ‘Caracas’, mientras caminaba por el ‘Bronx de Chapinero’ con una gorra de franjas blancas y rojas, que era la misma que tenía el patrullero Guevara cuando fue asesinado.

Por este crimen, las autoridades capturaron a Jorge Alexander Vargas Lozano, oriundo del municipio de Ambalema (Tolima) a quien se le imputarán cargos y se definirá si es enviado a la cárcel el próximo 4 de septiembre.

Mientras que a alias ‘Caracas', la Fiscalía le imputó los delitos de homicidio agravado y hurto calificado y la juez lo envió a la cárcel La Modelo de Bogotá.

Por este hecho se expidieron cuatro órdenes de captura más contra quienes habrían participado del homicidio y trasladado el cuerpo a la acera, donde fue posteriormente hallado por las autoridades.

Acosta Rendón tiene nacionalidad Venezolana; en este crimen están siendo investigados también cinco colombianos.