Era un ama de casa la mujer de 30 años de edad que fue asesinada el pasado martes 27 de agosto en las horas de la noche, en las afueras de una panadería del barrio Nueva Britalia, de la localidad Kennedy en el sur occidente de Bogotá.
Según testigos del crimen, Jennifer Paola Sosa Parra se iba a tomar un tinto con un amigo dentro del negocio cuando de repente fue llamada desde afuera por un tipo flaco y trigueño, y al salir recibió tres balazos con una pistola dotada de silenciador.
Jennifer Paola cayó agonizante sobre la acera, y en muy malas condiciones resultó remitida grave dentro de un bicitaxi a las instalaciones del Hospital de Kennedy a donde llegó sin signos vitales.
Todo parece indicar que Sosa Parra conocía a su verdugo, porque confiada dejó la bebida caliente servida sobre la mesa para atender al extraño tipo, quien tras apretar el gatillo del ‘fierro’ salió corriendo en medio de la confusión y la oscuridad de la noche.