Para algunos resulta menos difícil acatar el decreto del Gobierno de quedarse en casa durante la cuarentena, pues cuentan con recursos, comida y otras facilidades que les permiten pasar con mayor facilidad este complicado momento que atraviesa la humanidad.
Sin embargo, esa no es la realidad de los recicladores, que se ven obligados a salir a ganarse la vida de cualquier manera.
RCN Radio hizo un recorrido por el sur de Bogotá y el municipio de Soacha para evidenciar esta dura realidad. Estos colombianos siguen trabajando a altas horas de la noche, resistiendo el frío y el hambre, para poder sobrevivir.
Se les puede ver con sus carretas, caminando sin rumbo fijo, buscando en las bolsas de basura alojadas en algunas esquinas, junto a postes o andenes. Varios se detienen a buscar un material que sirva, que sea útil para la venta o el intercambio. Otros buscan sencillamente un alimento que les sirva para distraer las ganas de comer.
A otros se les puede ver caminando con un costal al hombro, buscando en cada zona donde ven bolsas, botellas o desperdicios, algún tesoro olvidado.
Estos ciudadanos que salen en las noches para evitar ser señalados por las autoridades caminan por calles y avenidas en medio de un silencio y un desamparo, que recuerda a una ciudad en ruinas por donde pasó una desgracia.