La Policía Metropolitana de Bogotá dio a conocer este lunes que mediante un agente encubierto, trabajos de seguimiento y la interceptación de llamadas telefónicas, se logró desarticular la banda delincuencial conocida como ‘La Bomba’.
El líder de esta organización era un hombre reconocido en el sur de la ciudad como un temido delincuente, dedicado al hurto de personas y a la venta de sustancias alucinógenas, quien con el tiempo formó su propia red de microtráfico, junto con su esposa, su hijo y su nuera, además de otras tres personas.
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La investigación de las autoridades señalan que la vivienda familiar y un bar eran los inmuebles que utilizaban para guardar y dosificar la droga que posteriormente expedían, especialmente en los alrededores de un colegio y cerca a varios parques del sector de Usme, buscando seducir en el consumo a menores de edad y a jóvenes. Este grupo delincuencial al día obtenía ganancias que oscilaban entre los $800.000 y 1'000.000.
De acuerdo a la Policía, no solamente amenazaban a los habitantes de la localidad para evitar que los denunciaran -sembrando temor entre ellos- sino que también habían instalado todo un circuito cerrado con cámaras de seguridad en la vivienda, para controlar la presencia de personas desconocidas en la zona.
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En el operativo se incautaron más de 150 dosis de bazuco que sirvieron para que en la audiencia el juez cobijara a los siete capturados con medida de aseguramiento en centros carcelarios.
Ahora serán procesados por los delitos de concierto para delinquir, tráfico, fabricación y porte de estupefacientes, además de la utilización ilícita de inmuebles.