Se espera que la estrategia continúe en el año 2020.
La Secretaría de Educación de Bogotá en alianza con el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), anunció que implementará una estrategia educativa flexible para que mujeres y hombres detenidos continúen sus estudios de primaria y bachillerato mientras cumplen las sanciones impuestas por la justicia en los centros penitenciarios El Buen Pastor, La Picota y La Modelo.
En total serán 300 hombres y mujeres quienes podrán finalizar sus estudios de primaria y bachillerato mientras pagan sus condenas, luego de haber sido seleccionados mediante un análisis de escolaridad del Inpec.
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Carlos Iván García Suárez, director de Inclusión e Integración de Poblaciones de la Secretaría de Educación, señaló que “esta estrategia educativa flexible se desarrolla a través de la política de educación inclusiva con enfoque diferencial de género y de derechos, que garantiza el inicio o la continuidad de la trayectoria educativa a la población privada de la libertad”.
El proceso académico de estos estudiantes finalizará el próximo 22 de noviembre, cumpliendo con los tiempos requeridos para el primer periodo de cada ciclo.
”Las clases en los centros penitenciarios y carcelarios se reiniciarán en febrero de 2020. De forma permanente, la Secretaría de Educación acompaña pedagógica, técnica y curricularmente a los docentes y al equipo pedagógico de cada centro penitenciario”, agregó el funcionario.
Para retomar sus estudios, los 300 estudiantes entregaron los certificados de los grados cursados y aprobados anteriormente. En el caso de las personas privadas de la libertad que no tuvieron forma de presentar estos documentos, aplicaron a pruebas de entrada para establecer las competencias mínimas requeridas y continuar sus estudios.
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García Suárez destacó que ese modelo “permitirá que si las personas cumplen su tiempo de condena, puedan tener la oportunidad de presentar su boletín de notas para ingresar a cualquiera de las 60 instituciones educativas distritales que implementan esta estrategia en jornadas nocturnas, de fines de semana o dominicales".
En ese mismo sentido, agregó que "si siguen en los centros de reclusión, podrán continuar con el proceso educativo en el segundo periodo correspondiente, es decir, en 2020”.
Se espera que en 2020 se pueda dar continuidad a esta estrategia con otras 2000 personas privadas de la libertad, vinculadas en todos los ciclos lectivos.
