El juez 23 penal municipal con función de control de garantías legalizó la recaptura de Nilson Vladimir Díaz y ordenó enviarlo a la Penitenciaria de Máxima Seguridad de la Picota, cómo presunto responsable de la desaparición forzada de la menor Sara Sofia, ocurrida el 28 de enero de este año en el sur de Bogotá.
En su decisión dejó en claro que los agentes del CTI de la Fiscalía General que hicieron efectiva su recaptura en el plena vía pública del municipio de Soacha, Cundinamarca, le respetaron todos los derechos del detenido.
Así mismo, sostuvo que los investigadores del CTI le permitieron la posibilidad de hablar oportunamente con su abogada Sandra Milena Galindo, una vez se produjo su detención, acorde a su derecho a una defensa justa y al debido proceso.
También dejó en claro que la Fiscalía y la policía judicial hicieron los trámites respectivos ante el Instituto Nacional de Medicina Legal para que le practicaran la correspondiente valoración médica.
Esta recaptura se produjo en cumplimiento de la medida de aseguramiento que emitió en su contra el juez 52 Penal Municipal con Función de Control de Garantías de Bogotá, quien acogió los argumento de la Fiscalía al considerar que Nilson Díaz, como padrastro de Sara Sofia, al parecer tendría relación directa con los hechos que rodearon la desaparición de la menor de la que hace más de siete meses, no se tiene conocimiento de su paradero.
Varios de los argumentos que expuso el funcionario judicial durante su exposición, fueron que Díaz representa un riesgo para la sociedad, por estar siendo investigado por la extraña desaparición de Sara Sofía y porque además, las evidencias que mostró la Fiscalía dejan entrever que la menor era maltratada, no solo por su padrastro sino también por su mamá, Carolina Galván.
También señaló que, al conocer la gravedad de su situación jurídica, existía una alta probabilidad de fuga, por lo que debe permanecer privado de la libertad de manera preventiva, mientras avanza la investigación.