Varios padres de familia se comunicaron con LA FM para denunciar que una profesora que trabajaba en el Gimnasio Campestre, uno de los colegios más tradicionales de Bogotá, amarró a un niño a una silla en castigo porque el menor se estaba meciendo en la misma.
De igual manera, señalan los denunciantes, la docente le puso una cinta en la boca al menor de edad para que se quedara callado mientras permanecía amarrado. Los niños, al ver esto, llegaron a casa a contarles a sus padres, muchos de los cuales se acercaron a la institución.
Allí, las directivas llamaron a la profesora para preguntarle por lo que supuestamente había acontecido y ella aceptó que amarró al menor a un silla dado lo inquieto que estaba. En cuanto a la cinta, dijo la mujer, el menor estuvo de acuerdo en llevarla en su boca. La docente fue destituida y el colegio puso el caso en conocimiento de la Secretaría de Educación.
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LA FM también conoció que los padres de familia y el colegio han entrado en un debate respecto a quién debe denunciar a la docente ante la Fiscalía General de la Nación. Los padres argumentan que el niño estaba estudiando y, por tanto, debe ser la institución quien instaure las acciones legales. El colegio considera que deben ser los padres quienes deben denunciar ante el ente acusador.
LA FM puso el caso en conocimiento de María Victoria Angulo, ministra de Educación, quien argumentó que no conocía el caso, pero anunció las pesquisas específicas y la ruta a seguir según la evidencia. La docente es psicóloga, estudio en una prestigiosa universidad de Bogotá e hizo unas especializaciones en el exterior. LA FM no da a conocer su nombre por cuanto no hay acciones legales contra ella.
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Denuncia de maltrato en el Gimnasio Campestre