Un joven rumbero murió en extrañas circunstancias en las últimas horas luego de salir de una fiesta dentro de una vivienda ubicada en el norte de Bogotá.
Al parroquiano lo hallaron en muy malas condiciones en inmediaciones de un almacén de cadena de la Calle 134 con la Carrera Novena de la localidad de Usaquén,
La victima resultó identificada como Juan Camilo Escobar, quien después de salir de la velada se dirigió a su casa en un taxi, pero extrañamente a las pocas cuadras lo ubicaron con golpes en la cabeza, secuelas que acabaron con su existencia en plena vía pública.
Juan Camilo alcanzó a ser llevado de urgencia a un centro hospitalario cercano, pero a la hora de su ingreso, expiró la marcharse de este mundo.
A través de cámaras de seguridad, se trata de establecer el recorrido del vehículo que le prestaba el servicio a Escobar para así saber qué fue lo que pasó en esos mortales minutos.