Sicario le valió 'un pepino' la cuarentena y mató a un vecino en el norte de Bogotá
Un sicario, importándole un carajo que estemos en medio de una cuarentena nacional para enfrentar al temido Covid -19, asesinó en las últimas horas a un parroquiano que recién había salido de su casa en la localidad de Usaquén, en el norte de Bogotá, rumbo a la tienda de la cuadra a comprar lo del desayuno.
El ataque ocurrió en las horas de la tarde en una de las calles del barrio Santa Cecilia, cuando el pistolero sin mediar palabra encendió a plomo a su víctima frente a la mirada de pocos ciudadanos que estaban cerca al lugar de los hechos.
La víctima resultó identificada como Edwin Alfredo Medina, de 39 años de edad, el cual al parecer dio unos cuantos pasos con los artículos comprados y de un momento a otro se le apareció el verdugo para descargarle una serie de proyectiles hasta dejarlo sin signos vitales sobre una fría acera.
Los habitantes del barrio de inmediato entraron en pánico y algunas mujeres gritaban.
Un parroquiano quien guardó la calma tomó su teléfono celular para llamar a la Línea de Emergencias 123 y dar a conocer el homicidio que habían ejecutado contra Edwin Alfredo.
Agentes de la Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog) arribaron en sus motos oficiales para acordonar el sitio, mientras unidades de criminalística del Cuerpo Técnico de investigación CTI de la Fiscalía General de la Nación adelantaban las labores de inspección y traslado de los despojos mortales en la popular ‘paletera’ a las instalaciones del instituto de Medicina Legal.
Todo parece indicar, según las primeras averiguaciones adelantadas por sabuesos especiales, que el crimen obedeció a una venganza personal.