Así es el procedimiento para la práctica de aborto a los 7 meses, según Ministerio de Salud
Por estos días la Corte Constitucional discute de nuevo el aborto en Colombia, al mismo tiempo que se conoció el polémico caso de una joven que interrumpió su embarazo a los siete meses de gestación, en contra de la voluntad del padre, argumentando que dicho procedimiento se dio dentro de las causales aprobadas por la legislación.
Este hecho desató una gran controversia por motivos éticos, morales e incluso legales, por parte de quienes consideran que no se cumplieron los requisitos establecidos por ley para este procedimiento y quienes, por el contrario, defienden el accionar de la mujer.
Sin embargo, uno de los aspectos que más ha llamado la atención es el punto de vista médico, dado el avanzado estado de gestación en el que se encontraba la mujer (entre siete y ocho meses).
Ante esto, Profamilia, entidad que llevó a cabo el procedimiento en la ciudad de Popayán, señaló que este fue totalmente legal y seguro, siguiendo los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud para embarazos avanzados.
Pero, ¿cuáles son estos protocolos? ¿Cómo se realiza de manera legal un aborto en Colombia cuando la madre está en el último trimestre del embarazo?
Lo primero que hay que decir es que el vigente fallo de la Corte Constitucional así como los protocolos del Ministerio de Salud no ponen una edad de gestación límite para realizar un aborto, pero sí diferencia los procedimientos que deben ser utilizados o no dependiendo el caso.
Así las cosas, antes de las 15 semanas de gestación (un poco más de tres meses de embarazo), se puede usar un método quirúrgico de aspiración uterina o con medicamentos abortivos.
Sin embargo, cuando el embarazo es avanzado, el procedimiento es diferente. Se tienen dos opciones: El primero es quirúrgico por medio de un procedimiento denominado Dilatación y Evacuación (DyE).
Este se considera el menos peligroso para la madre, aunque es invasivo, ya que se hace una aspiración del feto, el cual también es retirado por medio de pinzas. En ningún momento se trata de algo similar a una cesárea sino que más bien simula un parto inducido. Sin embargo, la seguridad de este procedimiento depende de que se haga de manera correcta y con los instrumentos adecuados.
Para esta intervención, la mujer es anestesiada, se deben evitar infecciones y se usa un medicamento abortivo para dilatar la vagina de la mujer, generar contracciones y permitir que el feto salga sin complicaciones.
El otro método permitido es con medicamentos, el cual se realiza utilizando dos fármacos: uno que termina con la vida del feto y otro que genera contracciones y fuerza el parto. Este procedimiento es menos efectivo entre más avanzado sea el embarazo.
Cualquier otro método abortivo en las últimas semanas de embarazo es ilegal y se considera peligroso para las mujeres. De acuerdo con Profamilia, el método usado para el caso particular en la ciudad de Popayán fue quirúrgico, induciendo el parto con medicamentos pero también siguiendo el método de Dilatación y Evacuación.