Canchas de fútbol. Imagen de referencia
El fuerte golpe que recibió el pequeño en la cabeza fue mortal
Las viejas y deterioradas porterías de hierro de una cancha de fútbol en el municipio de Magangué, han estado esperando por largo tiempo su reparación, siendo un campanazo de alerta para las autoridades, pero al parecer no pararon bolas.
La comunidad en repetidas oportunidades advirtió lo peligroso que era para los futbolistas y la comunidad residente en sus alrededores, pues bien, la tragedia llegó.
En el barrio La Paz, el miércoles siendo las 7 de la noche como de costumbre los niños de esa comunidad jugaban en el escenario, todo era derroche de alegría entre los pequeños, entre ellos estaba Richard David Arrieta Paternina, de 2 años.
De un momento a otro, una de las estructuras cayó aparatosamente alcanzando al pequeño en la cabeza, recibiendo un fuerte golpe que lo dejó inconsciente; fueron momentos de angustia para los padres y vecinos que no se explicaban lo ocurrido.
Richard David fue llevado al hospital La Divina Misericordia de Magangué, poco después de recibir la atención médica en urgencia, llegó la mala noticia para la familia, el niño murió debido al daño que le causó el fuerte golpe en la cabeza.
Ante lo ocurrido, la comunidad llamó a la Policía que acudió al lugar para indagar y empezar con la investigación.
Una versión indica que al parecer alguien habría movido la estructura, mientras que otra da cuenta que cayó sola debido a su mal estado. Pero serán las autoridades las que, mediante investigación, esclarezca lo que verdaderamente ocurrió.
Lo cierto es que hoy el barrio está de luto por la muerte del pequeño Richard David Arrieta Paternina, a quien se le veía feliz con cada patada que le daba a un balón en la cancha, una muerte que debió evitarse de no estar las porterías dañadas.
Fuente
Alerta Caribe
