Un menor de 7 años de edad habría fallecido ahogado al comer crispeta en Barrancabermeja, Santander. El hecho sucedió cuando el niño se encontraba en su vivienda compartiendo con su familia y consumió el alimento que le generó el ahogo.
Según Luis Barbosa, tío de la víctima, cuando se presentó la emergencia su mamá que es enfermera, le brindó los primero auxilios, luego lo trasladaron a un Puesto de Salud donde no fue atendido, ante esto lo llevaron a una clínica del puerto petrolero si signos vitales.
“Algo que uno nunca se espera, el niño estaba comiendo crispeta y de pronto se sintió ahogado y tomó agua, es donde viene la reacción que el agua lo ahoga, la mamá es enfermera y ella hizo todo lo que estaba a su alcance para hacerle la reanimación, fue llevado al puesto de salud, no lo pudieron atender y cuando llegó a la Clínica Magdalena estaba sin signos vitales”, indicó el tío.
Manifestó que el menor de edad se encontraba en perfecto estado de salud y no sufría de ninguna enfermedad que podría causar esta emergencia.
“El domingo pasado estuvieron reunidos con toda la familia, es algo que uno no se explica cómo suceden las cosas y por qué”, manifestó Barbosa.
La Clínica del municipio de Barrancabermeja, Santander, que recibió al menor de edad no se ha pronunciado sobre este hecho.