Pelao que se crió en pobreza agradece a sus amorosos padres adoptivos con una casota
Jayvee Lazaro Badile II es un filipino y exitoso hombre de negocios que ha logrado mucho en su vida desde muy temprana edad, pero su historia no siempre fue un cuento de hadas, pues creció en un ambiente de extrema pobreza.
Cuando Jayvee tenía tan solo tres meses de nacido, sus padres biológicos lo dieron en adopción a una pareja de esposos muy humildes. Ellos, Nanay y Tatay, lo recibieron con amor y así lo criaron, aunque vivían bajo condiciones muy precarias.
Desde muy pequeño, Badile II debió estudiar y trabajar a la vez para poder colaborar en su hogar y así poder salir adelante. “La vida fue muy difícil. Tenía que trabajar y estudiar, y estábamos felices de que mi mamá pudiera hacer dos comidas al día. Además de eso, vivíamos en un apartamento de 20 metros cuadrados, sucio y lleno de ratas”, narró el joven a los medios locales.
Con la ayuda y orientación de Nanay y Tatay, Jayvee creció y se educó. Pudo trabajar duro y convertirse en un importante ejecutivo, y tan pronto como se sintió seguro económicamente, centró su atención en pagar a las personas que le habían dado todo a pesar de su pobreza.
Unos meses antes de la Navidad del año pasado, el hijo decidió sacar a sus padres del lugar donde vivían con 28 personas más, en la que solo había un baño, electricidad defectuosa y sin agua para el consumo, y así entregarles las llaves de una lujosa y grande casa.
En una publicación de Facebook, Jayvee compartió fotos del lugar que una vez llamó hogar junto con la mansión que acaba de construir para sus padres. “Ahora que tengo la oportunidad de devolverles todo lo que me han dado, me aseguraré de que vivan sus sueños mejor de lo que podrían imaginar", explicó en su red social.
"Pagué la casa en efectivo y fue construida en un año", dijo Jayvee. "Tiene 7 habitaciones, y no trajimos nada del lugar anterior, excepto el televisor que compré para mi familia como regalo de Navidad antes". Ahora los padres de Jayvee viven en una hermosa casa con mucho espacio para compartir con los demás familiares.