La historia de Leandro Díaz contada por él, arropado con un saco de café porque no había cobija
La bioserie de Leandro Díaz tiene conectados a miles de fanáticos de la leyenda vallenata, quienes disfrutan cada noche con la producción del Canal RCN.
Silvestre Dangond le da vida todas las noches a este querido y reconocido cantante y compositor, y retrata los difíciles momentos que tuvo que vivir el maestro, para ser recordado como uno los más grandes del folclor vallenato.
Justamente, en las últimas horas se conoció un video, donde el mismo Leandro Díaz desempolvó su pasado y contó el sufrimiento que vivió cuando era un niño y sus padres se enteraron que era invidente.
Le puede interesar: A actriz de Leandro Díaz le jugó una mala pasada el viento y le levantó el vestido: Dicen que no tenía nada por debajo
El cantante comentó que, al momento de nacer sus padres se dieron cuenta ocho días después que había nacido invidente, “porque antes, las madres de familia a los niños los sacaban al sol y a los ocho días me sacaron y se dieron cuenta que no tenía la vista”.
Fue un trauma grande porque yo era el primer hijo de mi papá y fue una lucha, eso no lo viví yo porque yo era niño, me contaron después que yo nací”, expresó el artista.
De igual manera, reveló que en su juventud, su familia era pobre. “Nací con ese destino y poquito a poco crecí con ese ideal de darme golpes con todo lo que me encontraba”, comentó Díaz.
Respecto a cómo se enamoró de la música, el artista comentó que cuando se fue a vivir donde su tía Érotida. “Me fui vinculando poco a poco a las canciones que cantaba la tía, pero como todos los años íbamos a una finca de mi abuela, allá escuchaba los acordeones y me fui familiarizando con la música”.
“La gente le gustaba que yo cantara porque tenía gracia, no tenía quien me orientara, por eso, cuando escuchaba que me decían sombra, me acercaba y encontraba que no me daba sol y me daba cuenta que allá había sombra, fui encontrando las palabras y los sentidos sin alguna orientación”, dijo.
En la grabación, Leandro reveló otros momentos duros de su vida. Incluso confesó que no tenía ni una cobija para abrigarse del frío.
“Me montaba en el anca de un burro y me iba a bañar, pase mucho frio. Para mí no había abrigo, muchas veces me arropaba con un saco de café, dormía en una ‘trojita’, afirmó.
También aseguró que si tía Erótida le leía novelas y así aprendió a conocer el mundo de una forma distinta.
Lea también: Luisa Fernanda W y Pipe Bueno hablan de crisis en el embarazo: "¿Por qué dices mentiras?"
“Después que ya crecí, me leyeron muchas novelas, pero cuando estaba muchacho me leyeron una novela que se llamaba La María, de Jorge Isaacs. Una de las mujeres que me leyó bastante era Fanny Zuleta, por tener a las muchachitas cerca me convertí en adivino, pero no para enamorarlas, sino para charlar con ellas”, añadió.
De igual manera, Leandro Díaz agradeció a Dios por permitirle por la virtud que le dio, “porque además de ser ciego, me permitió ser compositor y quiero dejarles a mis amigos, este recuerdo para cuando muera”, concluyó.