En el país, cada vez más personas se encuentran en la difícil situación de no poder pagar sus deudas, lo que genera un aumento en el monto inicial por los intereses moratorios. Sin embargo, existe una alternativa legal que puede ayudar a quienes se encuentran en esta situación y llevar a que la deuda quede completamente saldada.

La prescripción de la deuda es una forma legal en la que el acreedor pierde el derecho a cobrar una deuda al deudor, especialmente si ha pasado cierto tiempo desde que la deuda estaba vigente. Es una manera de extinguir una obligación por el paso del tiempo.

Para quienes no saben cómo funciona la prescripción de una deuda, es importante tener en cuenta el tiempo y el tipo de deuda. Por ejemplo, si la deuda es de tres años y está respaldada por pagarés o letras, puede prescribir de manera sencilla. También aplica para facturas, cuentas de cobro, saldos en tarjetas de crédito o mora en el pago de la administración.

Una deuda puede prescribir a los cinco años si sus saldos se derivan de contratos de arrendamiento, deudas documentadas como sentencias judiciales o conciliaciones, entre otras.

Lea también: Nueva ley perdona deuda del 80% en multas de tránsito

Es importante destacar que el tiempo de prescripción empieza a correr a partir del momento en que la deuda era exigible. Esto significa que:

• Para deudas con fecha de vencimiento fija: el tiempo de prescripción empieza a correr desde el día siguiente al vencimiento.
• Para deudas sin fecha de vencimiento fija: el tiempo de prescripción empieza a correr desde que el acreedor exige el pago al deudor.

Existen algunos eventos que pueden interrumpir el tiempo de prescripción y hacerlo comenzar de nuevo, como el reconocimiento de la deuda por parte del deudor. En ese momento, el tiempo de prescripción se interrumpe y comienza a correr nuevamente. Si hay una demanda judicial para cobrar la deuda, el tiempo de prescripción se interrumpe y se suspende hasta que se dicte sentencia judicial. Finalmente, si el deudor realiza un pago parcial de la deuda, el tiempo de prescripción se interrumpe y comienza a correr nuevamente para el saldo restante.

Si una deuda prescribe, el acreedor pierde el derecho a cobrarla judicialmente. Esto significa que no puede demandar al deudor para que pague la deuda. Sin embargo, el acreedor todavía puede intentar cobrar la deuda de manera extrajudicial, es decir, mediante acuerdos con el deudor.

¿Es recomendable esperar a que la deuda prescriba?

No es recomendable esperar a que la deuda prescriba para no pagarla. Si bien la prescripción es una herramienta legal que puede ayudar a los deudores en dificultades, es importante tener en cuenta que:

• La prescripción no borra la deuda: La deuda sigue existiendo, incluso si prescribe. Esto significa que el acreedor puede seguir cobrándola de manera extrajudicial y, si el deudor no paga, puede afectar su historial crediticio.
• El proceso de prescripción puede ser complejo: Determinar si una deuda ha prescrito puede ser un proceso complejo que requiere el asesoramiento de un abogado.
• Existen otras alternativas para solucionar problemas de deudas: Hay otras alternativas legales, como la renegociación de la deuda o la insolvencia personal, que pueden ser más beneficiosas para los deudores que esperar a que la deuda prescriba.