El Gobierno informó recientemente que habrá dos aumentos significativos en el precio del diésel (ACPM) a lo largo de este año.

La medida, anunciada por el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, tiene como objetivo equilibrar el costo del diésel más cercano a los precios internacionales, lo que implicaría un aumento considerable desde aproximadamente $9,000 hasta niveles los $16,000 por galón.

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“Lo que sigue es efectivamente, como concertamos, el incremento del precio del diésel para hacer uno o dos movimientos este año”, indicó Bonilla luego del debate del proyecto de ley que buscaba aumentar el cupo de endeudamiento.

Estos aumentos están inicialmente dirigidos a los grandes consumidores de diésel, afectando al gremio de transportadores de carga y personas en el país. 

A pesar de reuniones anteriores con los sectores involucrados, aún no se ha alcanzado un acuerdo definitivo sobre la implementación y los detalles de los incrementos a este combustible.

El Gobierno continúa negociando con los actores clave para mitigar el impacto económico de estos aumentos en los sectores afectados.

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El aumento al valor de galón diésel podría ser mayor

El aumento del valor de este combustible está sujeto a las modificaciones de varios temas de cartera en el país, por ejemplo, el ingeniero Sergio Cabrales aseguró a La República que en caso de que se elimine el subsidio del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles, el precio del diésel incrementaría en gran valor; llegando a estar hasta 5.000 pesos por encima del valor actual.

Por otra parte, ‘Unidos’, la Cámara Intergremial del Transporte, tiene predicciones mucho más agresivas, según sus cálculos el incremento podría ser de hasta 7.000 pesos más. 

¿Por qué le van a subir el precio al diésel?

Colombia planea eliminar gradualmente el subsidio del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC) por varias razones fundamentales. 

El fondo enfrenta un déficit significativo, varios estudios previeron que alcanzaría los $7.6 billones en 2021 y $5.7 billones en 2022. Este déficit es considerable, representando más de la mitad del recaudo total por la reforma tributaria de 2023. 

El problema se ha agravado debido al aumento de los precios internacionales del petróleo y la debilidad del peso colombiano.

Además, el subsidio del FEPC implica una carga fiscal relevante que el gobierno considera insostenible a largo plazo. Es por eso que el ministro de Hacienda señaló el ajuste gradual del precio del diésel.

Se ha determinado que el fondo debe ser reformado para evitar que continúe generando déficits cada vez mayores. Se requieren medidas estructurales para asegurar que el FEPC sea fiscalmente sostenible y no represente un riesgo para las finanzas públicas en el futuro.

La eliminación gradual del subsidio del FEPC se deriva de la necesidad de reducir el déficit fiscal asociado con este fondo. El gobierno busca equilibrar la estabilidad de precios para los consumidores con la sostenibilidad fiscal a largo plazo, asegurando así un mejor manejo de los recursos públicos y una economía más estable.