La Secretaría de Educación de Bogotá (SED) reveló un preocupante hallazgo: varios casos de presunta falsificación de documentos por parte de docentes. La entidad denunció la situación ante la Fiscalía General de la Nación y, de forma paralela, inició investigaciones internas para aplicar sanciones disciplinarias a los involucrados.
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Aunque los hechos están bajo investigación, la SED aclaró que estos casos son aislados y no comprometen a ninguna institución en particular. Según datos oficiales, las irregularidades reportadas abarcan un periodo de 19 años, durante los cuales se han abierto 61 procesos disciplinarios relacionados con falsedad documental.
La Secretaría explicó que cada caso detectado ha seguido un protocolo específico. "Las presuntas falsedades se tramitan de manera inmediata a través de dos vías: Control Interno Disciplinario, que abre las investigaciones disciplinarias correspondientes, y la Fiscalía General, competente en materia penal", señaló la entidad en un comunicado.
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Desde 2005, la oficina de control disciplinario de la SED ha registrado 419 procesos relacionados con irregularidades en títulos académicos, de los cuales 376 ya han sido concluidos. Sin embargo, estos casos representan solo el 0.017% del total de docentes, lo que descarta la existencia de un supuesto "cartel de profesores". "Afirmaciones como estas son graves e infundadas, pues afectan la credibilidad del sector, los docentes y, especialmente, a las familias que confían en la educación pública", destacó la Secretaría.
Ante esta situación, la SED implementó dos equipos especializados encargados exclusivamente de verificar la autenticidad de los documentos presentados por los docentes. Además, la Procuraduría General de la Nación también ha intervenido, presentando pliegos de cargos y convocando a juicio disciplinario a varios profesores.
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Finalmente, la Secretaría hizo un llamado a preservar la confianza en la educación pública. En un momento complejo como este, la prioridad debe ser garantizar una educación de calidad y reforzar los valores éticos en el sector educativo. La institución reiteró su compromiso con la transparencia y la excelencia, fundamentales para el desarrollo del país y el futuro de los estudiantes.