Como parte de la operación Job, la Alcaldía Mayor de Bogotá anunció un duro golpe a “Los Maracuchos”, una banda delincuencial implicada en crímenes que involucran cuerpos embolsados hallados en las últimas semanas en Bogotá. En total, fueron capturados diez integrantes de esta organización delincuencial.
De acuerdo a Aníbal Fernández de Soto, secretario distrital de seguridad, son nueve organizaciones en Bogotá que se están disputando el control del microtráfico y que actúan bajo modalidades delictivas como extorsión o hurto; una de ellas son Los Maracuchos.
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¿Cuál es su origen?
Esta organización se estableció en Venezuela en el año 2013. A raíz de la migración masiva de venezolanos, varios de sus integrantes llegaron a Colombia. En 2018 comenzó su actividad delictiva en la ciudad de Valledupar cuando trataron de conformar una red de hurto a automotores y motocicletas.
Dos años después, en 2020, buscaron continuar con su operación en Cúcuta. Este mismo año llegaron a Bogotá, donde establecieron su centro de operaciones en el barrio Santa Fe, localidad de Los Mártires. El grupo estaba conformado por trece personas, de ellos cinco son colombianos y los otros ocho son venezolanos.
Ellos se encargaron de distribuir estupefacientes en diferentes establecimientos del barrio Santa Fe, especialmente en aquellos donde se ejerce la prostitución. En total comercializaban 38.000 dosis mensuales con ganancias promedio de 400 millones de pesos.
Alias “Leo”, quien está sindicado por delitos como venta de estupefacientes o hurto agravado, sería el líder de esta estructura criminal. Él era quien les señalaba a los demás integrantes la ruta para expender los estupefacientes y la extorsión a comerciantes.
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A “Los Maracuchos” se les atribuyen nueve homicidios cometidos durante 2022; cuatro de ellos fueron bajo la modalidad de sicariato, mientras que en los otros cinco abandonaron los cuerpos en vía pública, estos tenían signos de tortura.
Tras siete meses de trabajos de investigación, articulados con la Fiscalía General de la Nación, se logró la captura de diez de estos individuos. Siete de ellos fueron requeridos por delitos como homicidio, tortura o concierto para delinquir, los otros tres fueron capturados en flagrancia por porte y tráfico de estupefacientes.