Fiscalía acusó a Paul Naranjo de feminicidio agravado por muerte de Ana Castro

Ante la juez 34 Penal Municipal con Función de Control de Garantías de Bogotá, el fiscal de la Unidad de Vida de la Seccional de Bogotá, señaló que Naranjo supuestamente habría tenido relación con la muerte de la joven universitaria de 21 años, además estableció que fue lanzada desde un vehículo que supuestamente era conducido por Naranjo, sobre la calle 80 con carrera 69. 

Aunque la víctima fue trasladada al hospital Simón Bolívar de Bogotá, falleció tras presentar fuertes lesiones, una hemorragia en el hígado además de un trauma cráneoencefálico. 

El testimonio de Daniel Alejandro Vega, un hombre que se movilizaba en la madrugada del 5 de marzo de 2020, en la calle 80 con carrera 59 en el norte de Bogotá, ha sido contundente dentro de la investigación, teniendo en cuenta que señaló que vio cómo fue lanzado el cuerpo de la víctima sobre la vía desde el vehículo con vidrios polarizados en el que también se encontraba supuestamente Julián Ortegón, en compañía de Paul Naranjo.

El juez además señaló que la declaración juramentada que rindió ante la Fiscalía General de la Nación Vega Novoa, sirvió dentro de la investigación y fue fundamental en la judicialización de Ortegón. 

"Ese testimonio es objetivo e imparcial, no es que Daniel Alejandro Vega Novoa haya llegado de casualidad o de último momento ante la Fiscalía General de la Nación, al contrario, se acreditó el día de los hechos; esta persona llama al 123 y dice: a 30 metros observo un vehículo oscuro con los vidrios polarizados (que cumple con las características señaladas como el que iba manejando Paúl Naranjo y en el que también se encontraba el señor Julián Ortegón) del cual botan a una persona, de sexo femenino, de aproximadamente 20 años y cae como un muñeco (…)”.

La juez legalizó la captura de Naranjo, quien en la tarde del pasado lunes se entregó en las afueras del Complejo Judicial de Paloquemao en Bogotá. 

Por su parte, el abogado Jhon Cadena, defensor de Naranjo, aseguró en medio de la diligencia que su defendido no representa ningún peligro para la sociedad y que además no existe riesgo de fuga, pues se entregó ante las autoridades y está interesado en contar lo que ocurrió en la noche del 4 y en la madrugada del 5 de marzo de 2020 en el norte de Bogotá.