Un total de 22 personas, entre trabajadoras sexuales, portero, meseros y clientes, en su mayoría estadounidenses, fueron pillados en una fiesta sexual dentro de una lujosa vivienda de la localidad de Chapinero en el norte de la capital del país, en medio de la pandemia del Coronavirus.
El coronel Édgar Ávila, comandante de la estación de policía en la zona indicó a través de la emisora La Cariñosa 610 AM que la ilegal, burlando el toque de queda decretado por la Alcaldía Mayor, se conoció sobre las 9 pm en un inmueble de la Calle 95 con la Carrera 14.
Residentes en el lugar, llamaron a la Línea de Emergencias 123 para informar sobre la presencia de varias personas en el sitio que hacían fila desesperados para ingresar a la vivienda, en donde funciona un lujoso prostíbulo.
Al hacer presencia, agentes del orden en sus motos oficiales, sorprendieron a 13 personas, en su mayoría extranjeros, buscando los servicios sexuales de las ciudadanas apostadas en el interior en tacones tipo puntilla y sensuales ligueros.
Un ‘gringo’ muy molesto, habría manifestado que por ‘acá no volvía’, porque dio por adelantado un millón de pesos por el servicio con una de las mujeres, una botellita de aguardiente que le salió por 450 mil y para rematar, ahora deberá pagar el comparendo por la infracción cercano al millón de pesos.
En otras palabras, la salidita nocturna le salió al extranjero por casi 2 millones y medio de pesos, sin probar el trago y ni siquiera tomar de la mano a la trabajadora en el lugar.
La coronel Angélica Díaz, oficial de inspección y vigilancia de la Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog) comentó en el noticiero Alerta Bogotá que las 22 personas se llevaron el comparendo y al negocio lo sellaron por 10 días.