Prenden la alarma: aumentan los quemados por pólvora en Bogotá y Cundinamarca
En un reciente informe, el secretario de Salud de Bogotá, Gerson Bermont, reveló que hasta la fecha se han registrado 68 casos de quemaduras por pólvora en la capital, lo que representa un incremento significativo en comparación con el año anterior.
En total, la cifra de quemados por pólvora en Bogotá y Cundinamarca ha alcanzado los 81 casos, reflejando un aumento cercano al 50% respecto a los reportes del año pasado.
La mayoría de los afectados son menores de edad, lo que ha llevado a las autoridades a hacer un llamado urgente a la prevención. El observatorio de salud de Bogotá enfatizó la importancia de que los padres mantengan a los niños lejos de la pólvora y que actúen con rapidez en caso de que se presente un incidente.
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La situación despertó la preocupación de las autoridades locales, especialmente ante el recuerdo de la tragedia ocurrida en diciembre de 2022, cuando 49 personas murieron a causa de intoxicación por licor adulterado en la ciudad.
Ante este panorama de riesgo, las autoridades han emitido recomendaciones específicas para la ciudadanía. La secretaría de Salud pidió a los padres a educar a sus hijos sobre los peligros de la pólvora y a supervisar su entorno durante las celebraciones. La prevención se convierte así en un tema central en la agenda de salud pública de la ciudad.
En un contexto relacionado, el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, tomó medidas para combatir la venta ilegal de licor adulterado. Recientemente, la administración local incautó 2,194 botellas de bebidas alcohólicas que estaban a punto de ser vendidas de manera ilegal en la Plaza España. Este operativo forma parte de un esfuerzo más amplio para garantizar la seguridad de los ciudadanos durante la temporada navideña.
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Hasta ahora, se han confiscado más de dos toneladas de pólvora destinada a la venta ilegal, lo que busca prevenir más accidentes y proteger a la población, según Galán.
El secretario Bermont también advirtió sobre los peligros del consumo de licor adulterado, que puede provocar consecuencias devastadoras, como ceguera, convulsiones y daños neurológicos.