Al parecer el hoy ‘finado’ invitó a la extraña mujer a su apartamento en Puente Aranda de Bogotá y esta lo escopolaminó.
Un guardia del Instituto Nacional Penitenciario y carcelario (Inpec) murió en las últimas horas dentro de un apartamento ubicado en el centro sur de Bogotá, producto de una presunta sobredosis de escopolamina.
Todo parece indicar que dos viejas ingresaron a la casa del custodio, para acompañarlo a él y a un amigo, en medio de una tertulia e ingesta de ‘traguito’ que desarrollaban en el barrio San Francisco Occidental en la localidad Puente Aranda.
La víctima, identificada como Óscar Pinzón Alvarado de 40 años de edad junto a un ‘parcero’ estaban ingiriendo licor, pero al sentirse solos, se hicieron acompañar de dos extrañas féminas que se levantaron por el sector.
Las populares ‘tomaseras’, ya dentro del predio, le habrían aplicado un somnífero en el trago al par de amigos que los puso a dormir profundamente.
Al día siguiente el alegado a Óscar se levantó y se dio cuenta que las viejas ya no estaban y los habían robado, pero lo más triste fue hallar sin signos vitales a Pinzón Alvarado sobre su cama, por los presuntos efectos de la supuesta burundanga.
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