14 Jul 2019
01:33 PM
Padres de niña indígena asesinada fueron condenados a 36 horas en el cepo
La condena se da según las leyes indígenas.
Un giro inesperado ha dado la terrible historia del feminicidio de una menor Embera Chamí registrado hace unos días en el municipio de Mistrató, Risaralda, cuando sus padres fueron condenados a 36 horas en el cepo, según el estatuto que manejan en las comunidades indígenas de esta zona del país.
De acuerdo al Consejero Mayor del CRI, William Nayasa, para las comunidades indígenas el hurto es un hecho muy delicado y debido a la presunta participación de los padres de la menor en hurtos cometidos en la vereda donde residía la familia, se llegó a la decisión de condenarlos.
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“Si los papás sacaban cosas de los vecinos no indígenas, ellos (victimarios) no tenían por qué llevarse a la menor y matarla de esa forma; ahora, las autoridades indígenas se encuentran investigando a la familia de la niña, ya que como los que la mataron dijeron que había sido porque los papás robaban a los vecinos, estos fueron condenados a 36 horas en el cepo”, fueron las palabras del Consejero Mayor del CRI.
Además, Nayasa señaló también que adicionalmente a que el hecho de ser denunciados como ladrones ya es delicado dentro de las comunidades indígenas, como esto, según los homicidas, fue la causa principal del asesinato de la menor, de comprobarse que en efecto sí cometían hurtos, los padres de la menor podrían recibir una condena ejemplarizante por parte de la justicia indígena.
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"Si la justicia indígena del resguardo que los está investigando, logra comprobar que ellos sí estaban robando a sus vecinos y que por esto pagó con su vida la menor inocente, los pueden estar condenando hasta a 15 años yendo a todas las veredas y resguardos de la zona para hacer trabajos comunitarios”, indicó Nayasa.
Hay que recordar que por este hecho, tres hombres fueron enviados a prisión por la justicia ordinaria señalados de ser los presuntos autores intelectual (1) y materiales (2) del feminicidio de la menor Embera Chamí de 12 años, cuyo cuerpo fue encontrado en medio de un cafetal cercano a su casa, con múltiples heridas producidas con arma blanca.
