Hombre que estuvo once años postrado en una cama inventó su propia cura
¡Cómo un milagro! Así califica su historia de vida Doug Lindsay, un hombre que se volvió una especie de ‘científico’ autodidacta a causa de una rara enfermedad que lo dejó varios años sin poder moverse de la cama.
Su enfermedad comenzó en 1999 cuando el joven tenía apenas 21 años. Lindsay estudiaba en la Universidad Rockhurst en Missuri y después de su primer día de clases, los síntomas empezaron a aparecer.
Mareos, debilitamiento, y aceleración del corazón fueron algunos de las señales que le advirtieron al joven que algo no estaba bien. “Incluso recostarse en el suelo no se sentía lo suficientemente bajo”, dijo Lindsay a Ryan Prior, periodista de CNN.
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A pesar de que los médicos trataron de hallar una solución para su problema, se encontraban desconcertados por no tener una solución para su enfermedad. Así que el joven decidió buscar su propia cura.
En los libros encontró la respuesta
Los días de Lindsay se concentraron en pasar 22 horas del día acostado en una cama. “Si estaba despierto, era porque estaba comiendo o yendo al baño”, aseguró al periodista de CNN.
La primera pista sobre su rara enfermedad la encontró en un viejo libro de endocrinología que encontró cerca de un basurero de su Universidad. El texto hablaba sobre trastornos suprarrenales que podrían reflejar trastornos de la tiroides. El joven se concentró en sus glándulas suprarrenales.
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Desde ahí empezó a plantear la hipotesis de que podían existir diferentes trastornos más allá de los que ya habían sido estudiados por los médicos. Posteriormente y luego de una ardua investigación, Doug Lindsay logró que un científico trabajara con él.
A partir de ese momento, empezó su hazaña. En 2002 logró llegar a una importante reunión científica en Carolina del Sur; vestido con traje y en su silla de ruedas presentó lo que él consideraba podría ser su cura, “estaba entrando en un mundo de ciencia en el que no podía participar porque estaba en casa y no podía ser un estudiante graduado”, aseguró al medio de comunicación.
Dos años después de su encuentro con el mundo científico, el hombre logró por medio de un medicamento llamado Levophed durar activo por varios periodos de tiempo con ayuda del doctor Cecil Coghlan.
Primer paciente de una nueva cirugía
“Si no hay una cirugía, voy a hacer una”. Tras varias investigaciones y con ayuda del médico Coghlan, Lindsay creó un documento de 363 páginas que proponía una primera medulectomía suprarrenal humana.
El proceso para encontrar a un cirujano que se arriesgara a hacer el procedimiento no fue fácil. Tardó casi 18 meses en hallar a alguien que estuviera dispuesto a correr un riesgo con él y fue hasta el 2010 que logró dar con un cirujano de la Universidad de Alabama-Birmingham, quien le extrajo con éxito una de sus médulas suprarrenales. Con esto, tiempo después logró estar sentado por tres horas e incluso en Navidad logró caminar 1,6 kilómetros.
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Su proceso de recuperación fue largo. Tuvo que someterse a otra cirugía, sin embargo, luego de casi 16 años logró graduarse de una licenciatura en Biología.
Lindsay, a sus 41 años se convirtió en un consultor médico. Ha viajado por varios lugares, incluidos Stanford y Harvard para hablar de su hazaña científica. “Recibí ayuda de la gente y ahora tengo que ayudar a la gente”, aseguró.