La historia del secuestro y asesinato de una niña de 7 años, a manos de un conductor

Un hecho insólito ha causado conmoción en Texas y en todo el país estadounidense. El crimen que dejó sin aliento a la población se debe al asesinato de Athena Strand, una menor de 7 años por parte de un conductor de FedEx que distribuía paquetes por allí.

El miércoles 30 de noviembre, a pocos metros de su casa, en Paradise, una pequeña localidad de medio millar de habitantes ubicada a 60 millas (100 km) al noroeste de Dallas, la niña fue secuestrada y asesinada por el funcionario de la mensajería. 

Según información de medios locales, Athena se encontraba con su padre pasando unas vacaciones, quien el miércoles se encontraba en un viaje de caza. La menor, que había llegado a las 4:15 p. m, en el bus escolar, decidió salir de la casa por un enfado con su madrastra, situación que en ocasiones pasadas ya había hecho. 

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Sin embargo, en esta oportunidad no fue así, nunca volvió,por lo que a las 6:40 de la tarde se reportó la desaparición. 

Posteriormente, se emitió una alerta amber y se iniciaron las labores de búsqueda en la que participaron 300 voluntarios, 50 oficiales, drones, perros adiestrados y hasta un helicóptero.

En unión con el FBI, se logró la recopilación de registros informáticos, entrevistas e incluso, se dio con el contacto de delincuentes sexuales registrados en la zona.

En medio de la investigación se recibió una pista de un vecino que dijo haber visto el camión de FedEx en el lugar de la desaparición, pues su padre habría recibido una entrega en la casa del padre. La empresa colaboró en las labores de investigación.

Como resultado, se conoció que la niña no se había perdido, sino que en el momento preciso que la niña salió, Horner, presunto responsable de 31 años, la vio sola y se la llevó y minutos después la habría matado.

Por su parte, una vecina de Horner en Fort Worth contó que alrededor de la una de la tarde del viernes, un equipo del SWAT entró a la casa del hombre y allí, fue arrestado al asesino de la pequeña Athena, pensaban más bien que era algo de drogas.

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De acuerdo a las confesiones del sujeto, el cuerpo de la menor estaba en dos ubicaciones falsas, sin embargo, se encontró el cadáver a 7 millas (12 km) de donde fue secuestrada.

Finalmente el acusado fue ingresado a la Cárcel del Condado Wise donde enfrenta dos cargos, uno por secuestro agravado con una fianza de 500,000 y otro por asesinato capital con fianza de un millón de dólares.

“No podemos entrar en el contenido de su confesión pero puedo decir que tenemos la confesión”, dijo Lane Akin, sheriff del condado Wise, del acusado.

“Creemos que Athena murió pocas horas después de haber salido de su casa”, agregó.