Lastimosamente, la niñez en Colombia está en riesgo y las cifras lo demuestran. Medicina Legal en su más reciente reporte del año 2022 aseguró que, entre enero y septiembre del año pasado, se registraron 15.823 víctimas de abuso sexual contra menores de edad, un 23% más que en el mismo periodo del año 2021.
Los niños entre los 10 y 14 años son los más afectados con 8.430 casos reportados, seguido por los niños entre 5 a 9 años con 3.188; los jóvenes entre 15 y 17 años víctimas de violencia sexual fueron 2.846 y los menores comprendidos entre los 0 a 4 años la cifra escaló a 1.359 casos. Datos alarmantes para Medicina Legal y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).
Las alarmantes cifras y las constantes denuncias deben poner en alerta a todos los padres de familia y acudientes de menores de edad, ya que en algunos casos, los niños víctimas de abuso sexual desconocen que lo están siendo y otros callan por pena o miedo.
Alerta Bogotá, junto a expertos del tema, realizaron un breve abecé acerca de cómo detectar un abuso infantil y se resolvieron algunas de las dudas más comunes al momento de hablar de este tema.
¿Qué se considera abuso sexual infantil?
Según la Ley 1146 de 2007 “La violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes comprende todo acto o comportamiento de tipo sexual ejercido sobre ellos, utilizando la fuerza o cualquier forma de coerción física, psicológica o emocional, aprovechando sus condiciones de indefensión, desigualdad y las relaciones de poder existentes entre víctima y agresor”.
Para el ICBF la violencia sexual se puede presentar en distintas formas:
- Violencia o asalto sexual: se conoce como acceso carnal violento, en este el victimario utiliza la fuerza, violencia o amenazas para aprovecharse del menor de edad.
- Abuso sexual: este se da cuando el menor es tocado, besado o acariciado de manera indebida o aprovechada por la edad, condición de discapacidad.
- Violencia sexual en conflicto armado: actos de violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes dentro del conflicto armado.
- Trata con fines de explotación sexual: se conoce cuando el menor de edad es alejado de su lugar de vivienda y explotado sexualmente.
- Explotación sexual: se da cuando un menor de edad es utilizado con fines sexuales por otra persona, la cual recibe un pago en dinero o especie.
Señales de alarma para detectar el abuso sexual en menores de edad
Para el Bienestar Familiar existen tres indicadores importantes para identificar un posible abuso sexual: indicadores físicos, comportamentales y sexuales.
Indicadores físicos:
- Dificultad para sentarse o al caminar
- Dolor, golpes, heridas en la zona genital o anal
- Ropa interior rasgada, manchada y ensangrentada
- Dolor o irritación en las partes genitales (enrojecimiento o hinchazón)
- Presentar enfermedades de trasmisión sexual en genitales, ano, boca u ojos
- Infecciones urinarias
Indicadores comportamentales:
- Agresividad
- Pérdida de apetito
- Llantos frecuentes injustificados
- Resistencia a bañarse o desvestirse
- Miedo a estar solo con una persona en particular
- Rechazo al adulto o al cuidador
- Aislamiento o rechazo en sus relaciones sociales
- Problemas escolares o rechazo a la escuela
- Conductas regresivas (miedo a dormir solo, chuparse el dedo, entre otro)
- Fugas del hogar o del colegio
Indicadores sexuales:
- Lenguaje de contenido sexual
- Rechazo a manifestaciones de afecto
- Conocimientos sexuales inadecuados para su edad
- Interés exagerado por comportamientos sexuales de los adultos
- Conductas seductoras y sexualizadas
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Claves para identificar un posible agresor
Se debe tener en cuenta que no existe un perfil específico para identificar un agresor sexual, pero para Luis Jesús Prada Moreno, especialista forense del Instituto Nacional de Medicina Legal, un victimario sexual de menores puede ser un individuo de cualquier sexo, edad, estrato social, condición física o cognitiva y religión.
Según el ICBF y el experto Prada, existen algunas conductas que pueden generar algún tipo de sospecha, tales como:
- La compulsión a la pornografía
- Insistencia por permanecer a solas con los menores de edad. Inventado cualquier cosa para lograrlo
- Muestras exageradas de cariño o de afecto hacia un menor de manera injustificada
- Preferencia por socializar con menores de edad que con adultos
- Haber estado involucrado o tener denuncias por abuso sexual
- Consumo problemático o abuso de sustancias psicoactivas.
¿Por qué algunos niños víctimas de abuso prefieren callar?
Duván González, Psicólogo del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, afirma que muchos de los niños que han sido abusados sexualmente se sienten intimidados y vulnerables, por lo que prefieren callar para no quedar en esta misma situación. Asimismo, varios de los abusadores tienen amenazados a los niños para que ellos no hablen. “El abusador o el agresor, mediante la fuerza, el miedo, la manipulación y el engaño, busca que la víctima no manifesté lo sucedido y el menor para que no vuelva a suceder lo ocurrido prefiere callar”, afirmó.
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¿Cómo lograr que un menor de edad víctima de abuso hable del tema?
Es muy importante que desde muy pequeño el menor entienda que su cuerpo es de él y merece respeto, esto es una forma para que el menor empiece a establecer barreras y no permita que otra persona toque su cuerpo. De acuerdo con Duván González, es esencial que desde muy temprana edad se empiece a fortalecer la personalidad y autoestima del niño, esto se puede lograr escuchando al menor y hablándole de todas las cosas positivas que tiene.
“Cuando el niño o niña no nos quiera expresar algo que le paso, así no sea de contenido sexual, es muy importante validar esa emoción, con la finalidad que el niño de una u otra forma pueda expresar todo lo que le está pasando sin ninguna dificultad”
De la misma manera, aconseja a los padres a enseñar a sus hijos a expresar un rechazo frente a las caricias y las conductas que los hacen sentir incómodos, haciéndole entender que si no le gusta algo que otra persona haga sobre su cuerpo (abrazos, cosquillas, besos) él pueda expresarlo a sus padres para así poner un límite.
Cuando se busca que un niño hable de tema se recomienda más que hacerle preguntas directas, se hable por medio del juego, pues, a través de este, en muchos casos se puede evidenciar conductas sexuales del menor, “en algunos casos las menores víctimas de violencia sexual cogen sus peluches o muñecos y comienzan a vestirlos de una manera no acorde con su edad (minifaldas, blusas cortas) o cogen una muñeca y tocan las partes íntimas del objeto, si se evidencia esto el adulto debe preguntar ¿a ti alguien te ha hecho eso?”, aseguró el psicólogo Duván González.
¿Por qué es común que algunos niños víctimas de abuso sexual sientan culpa de lo sucedido?
Es común que el abusador manipulé y chantajeé al niño, haciéndolo sentir que lo que sucede él se lo merece. Muchas veces lo que aplica el agresor es decirle al menor “yo te hago esto porque tú no eres un niño juicioso, eres un niño que se porta mal, no haces las tareas o no te comes todo”, manipulando y haciendo que el niño sienta que todo lo que le está sucediendo es consecuencia a sus actos. Debido a esto, es importante que el menor sepa que por cometer algún tipo de falta nadie puede castigarlo de una manera que le cause tristeza, dolor o sufrimiento.
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¿Cómo se puede prevenir un abuso sexual infantil?
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar da algunos consejos que se deben tener en cuenta al momento de hablar sobre la prevención de abuso sexual en menores:
- Hablar de las partes del cuerpo por su nombre: se recomienda que desde sus primeros años de vida los niños reconozcan sus órganos genitales y se refieran ellos por su nombre, pues cambiarle el nombre puede generar confusión en el menor.
- Enseñarles a decir NO: los tutores de los menores deben enseñarles a los menores sobre las caricias positivas de las negativas y, así mismo, aprender a decir NO cuando algo nos les guste o se sientan incómodos.
- Evitar darle besos en la boca: se suele acostumbrar que los padres le den besos en la boca a menores, pero lo ideal es no hacerlo, pues muchos niños normalizan los besos en la boca como muestra de afecto que pueden recibir de cualquier persona, exponiendo al menor a una situación de violencia sexual.
- Enseñarles el consejo del mal: se puede aprovechar el método pedagógico de los villanos de los cuentos y de las películas para educar sobe este tema a los niños y reflexionar acerca de la maldad y como a pesar de lo cercana, amigables, amorosas que se pueden ver algunas personas también pueden ser malas y hacer daño.