No han sido días fáciles para los bogotanos, pues además de la llegada del coronavirus a la ciudad, la crisis ambiental se cierne como una nueva problemática que no parece ceder a los intentos para reducirla.
Según la Red de Monitoreo de Calidad del Aire de Bogotá, en este momento la calidad del aire de la ciudad ha tenido un nivel de mejora de condiciones moderadas (color verde) mientras que por Chapinero y Kennedy, aún se encuentran de color amarillo (regular).Cabe recordar que la mayoría de estos sectores se encontraban en color amarillo. Lo que llevó a tomar medidas como el pico y placa ambiental, para mitigar el impacto de los materiales particulados en la ciudad.
De acuerdo al informe de esa entidad, las lluvias de las últimas horas, la reducción de movilidad producto de las restricciones implementadas y los cambios en los regímenes de vientos han ayudado a tener una mejor calidad del aire respecto al día en que se declaró la alerta amarilla.
Las restricciones para los vehículos de carga y el pico y placa extendido para vehículos particulares y motocicletas han sido otro de los factores para que los niveles de contaminación estén disminuyendo.
Se esperaba que durante la mañana de este lunes se presentaran episodios de inversión térmica. Sin embargo, la alerta se mantiene, al igual que los monitoreos a los factores externos, que pueden incidir en la contaminación atmosférica de la ciudad.