Cundinamarca enfrenta una preocupante disminución en los niveles de sus principales embalses debido a la temporada seca, que se extenderá hasta abril, según advirtió la CAR Cundinamarca.
El sistema de Chingaza, fundamental para el suministro de agua en Bogotá y la región, reporta un nivel del 44,20%, mientras que el embalse de La Chuza se encuentra en 35,89%.
Otros sistemas, como el Agregado Norte, están en 52,75%, y el agregado del Teusacá, en 46,62%, reflejando una acelerada reducción de sus capacidades.
La entidad advierte que, de continuar la tendencia, el nivel del embalse de Chingaza podría descender por debajo del 44% en la próxima semana y alcanzar un crítico 30% a finales de enero.
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Este descenso pone en riesgo la disponibilidad hídrica, especialmente ante el aumento del consumo por las altas temperaturas que afectan a Cundinamarca y otras regiones del país.
Para mitigar esta situación, la CAR insta a la ciudadanía a adoptar prácticas responsables de uso del agua:
1. Revisar fugas: Reparar grifos o tuberías que presenten goteos.
2. Uso eficiente en el hogar: Cerrar el grifo mientras se cepillan los dientes o lavan los platos.
3. Reutilizar agua: Aprovechar el agua de la lavadora para limpiar pisos o riego moderado de plantas.
4. Disminuir riego en jardines: Regar únicamente en las primeras horas de la mañana o al atardecer para evitar evaporación.
5. Cargar al máximo lavadoras y lavavajillas: Reducir la frecuencia de uso para optimizar el consumo.
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La CAR destacó la importancia de la participación ciudadana en este esfuerzo colectivo para garantizar la disponibilidad de agua durante esta temporada seca. Asimismo, invitó a las autoridades locales a reforzar campañas de sensibilización y monitoreo para evitar una crisis hídrica.
Finalmente, indicaron que el ahorro de agua es clave para enfrentar la sequía, que podría prolongarse en el primer trimestre de 2025. Las prácticas responsables en el consumo son esenciales para evitar el agotamiento de los recursos hídricos y mitigar el impacto ambiental.