"Sentí que la muerte me llevaba": Conductor del SITP atropellado por campero
El conductor del bus del Sistema Integrado de Transporte Público, al que un sujeto con su campero Toyota engallado le pasa por encima de sus dos piernas en una calle del norte de Bogotá el pasado miércoles festivo 7 de agosto, se mostró muy triste por la decisión de un juez de la república de dejar en libertad a su verdugo en las últimas horas en el Complejo Judicial de Paloquemao, porque el video circulante a través de las redes sociales no tuvo cadena de custodia y no es elemento probatorio.
Isaías Vargas Díaz de 39 años de edad, y padre de tres menores de edad, dijo en la emisora La Cariñosa 610 AM de RCN Radio, que tan pronto vio cómo caía sobre el asfalto de la carrera séptima con calle 82, y era atrapado por las grandes llantas, sintió que la muerte se lo iba a llevar para siempre.
El profesional del volante comentó en el noticiero Alerta Bogotá, que ese día no hubo altercado alguno con José Mauricio Gil Velásquez, el chofer del campero causante del percance. por el choque que éste provocó con los neumáticos delanteros en contra de la máquina del SITP que conduce desde hace tres años.
El señor Vargas, boyacense de nacimiento, indicó que estaba enrutado hacia el sector de San Luis en la vía al municipio de La Calera cuando de repente sufrió los daños de pintura en el automotor a su cargo por el impacto. y a la hora de arreglar, observó que el sujeto se quería volar del sitio junto a la mujer que lo acompañaba en ese momento.
Don Isaías, residente en la localidad de Engativá en el noroccidente de la capital del país, no tuvo otra que sentarse en una de las llantas delanteras del coche adaptado para el camper cross y llamar a sus jefes inmediatos en el respectivo patio, cuando de repente Gil acelera para atraparle las extremidades inferiores, especialmente la izquierda, la cual sufrió serias laceraciones, pero gracias a Dios sin fracturas.
El lastimado relató que a los 10 minutos ya estaba siendo auxiliado por paramédicos del servicio distrital de salud. y en una ambulancia fue conducido a las instalaciones de la Clínica Marly en donde le manifestaron médicos de turno que por fortuna no había órganos vitales comprometidos, pero si intenso dolor que hoy lo tienen contando la historia.