La Corporación Autónoma de Cundinamarca (CAR), reportó que tres flamencos rosados (especie en vía de extinción), permanecían como mascotas en una finca del municipio de Fusagasugá.
El director de Evaluación, Seguimiento y Control Ambiental de la CAR, Carlos Bello, precisó que "los animales eran usados como mascotas, sometidos para la diversión humana. Incluso les daban de comer lo mismo que comemos los humanos, cuando sabemos que estos animales comen peces y diversos crustáceos".
Esa entidad indicó que se logró la recuperación de estos animales junto con la Policía, en un operativo contra el tráfico y la tenencia ilegal de fauna silvestre.
"El flamenco rosado es una especie exótica que en Colombia se encuentra en la categoría de amenazada y vulnerable a la extinción. Infortunadamente son animales que por sus esbeltas características físicas son muy apetecidos en el merado negro, en el que por un solo ejemplar se puede pagar alrededor de un millón de pesos", afirmó.
Cabe mencionar que los animales fueron trasladados al Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre de la CAR Cundinamarca, ubicado en el municipio de Tocaima.
"La idea es estabilizarlos y de ser posible, volverlos a ubicar en su hábitat natural. Esperamos muy pronto llevarlos a La Guajira", precisó el funcionario.
Por su parte, el director general de la CAR, Luis Fernando Sanabria, ha sido reiterativo en hacer el llamado a la comunidad para que denuncie la presencia de fauna silvestre fuera de su hábitat y sobre todo para que la ciudadanía evite comprar estos animales, pues al hacerlo se contribuye negativamente a fortalecer su tráfico.
El Ministerio de Ambiente reportó que cada año son incautados cerca 23.600 animales, muchos de los cuales son sacados de su hábitat para ser vendidos ilegalmente.