Una peligrosa banda de cosquilleros quedó al descubierto por las autoridades al evidenciar el insólito modus operandi que tenían en el transporte público de Bogotá. Tras varios meses de seguimiento, la Policía Nacional obtuvo las pruebas para la judicialización de los miembros de estos temibles pillos.
‘Los Envía’ –como son conocidos los miembros de esta banda– son los integrantes de una red que tras robar teléfonos en los buses se los vendían a un afamado reducidor apodado ‘El Enano’ y quien, de acuerdo a las autoridades, se encargaba de enviar a otros países los dispositivos hurtados.
Teniendo claro que el código IMEI era reportado en Colombia, estos pillos hurtaban los móviles y procedían rápidamente a su envío a otros países de la región para lograr su comercialización sin ningún tipo de problema.
Con órdenes de seguimiento emitidas por un juez, los investigadores montaron un dispositivo que les permitió obtener las pruebas para poder procesar por el delito de concierto para delinquir a tres mujeres y dos hombres que conformaban la banda ‘Los Envía’.
Al ser claramente identificados, los agentes encubiertos iniciaron las pesquisas en los buses y así tener la evidencia. Lo primero es que los malhechores siempre ascienden a los vehículos por la puerta trasera para iniciar su plan delictivo: bloquear el paso a los usuarios.
Ante estos obstáculos, los ciudadanos son presa fácil para ser esculcados en cuestión de segundos al tener impedidos sus movimientos normales. Su propósito es formar una especie de corredor para quien se quiera bajar del transporte quede en medio de los ladrones.
Luego de varios meses de seguimiento, una arriesgada policía logró acercarse a los integrantes de la banda para dejarlos al descubierto. En un video con cámara escondida, la agente reveló cómo –al mejor estilo de los grandes actores colombianos– todos simulan ser ciudadanos de bien, cuando en realidad son hampones.
Mientras simulan que están ayudando a los demás pasajeros, los malvados proceden a cometer el cosquilleo. En la grabación se ve cuando le hacen el lance a la maleta de un pasajero, luego le meten las manos al bolsillo a otro ciudadano y finalmente roban a una mujer su celular.
Hasta el centro de Bogotá llegó entonces la operación de la Policía tras hacerle el completo seguimiento a ‘Los Envía’. Los ladrones terminaron entregando a las autoridades, sin saberlo, la guarida donde les compraban los celulares robados. Un pequeño local del centro –operado por los reducidores– es el destino final de los equipos robados en Bogotá que llegan a otros países.