Los frijoles son más que un alimento, pues representan parte de nuestra cultura colombiana, pero en ocasiones a muchas personas les resulta un desafío su preparación sin una olla a presión, pero con un poco de paciencia y los pasos correctos, puede ser un proceso sencillo y delicioso. Aquí te explicamos cómo hacerlo.
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Ingredientes:
- 2 tazas de frijoles (negros, rojos, pintos, etc.)
- 6-8 tazas de agua
- 1 cebolla grande, picada
- 3 dientes de ajo, machacados
- 2 hojas de laurel
- Sal al gusto
- Aceite de oliva (opcional)
Instrucciones:
1. Remojo:
Coloca los frijoles en un recipiente grande y cúbrelos con agua. Déjalos en remojo durante al menos 8 horas o toda la noche. Esto ayuda a reducir el tiempo de cocción y mejora la digestibilidad de los frijoles.
2. Enjuague:
Después del remojo, escurre los frijoles y enjuágalos con agua fría para eliminar cualquier residuo.
3. Cocción inicial:
En una olla grande, añade las 6-8 tazas de agua y los frijoles remojados. Lleva a ebullición a fuego alto.
Una vez que el agua esté hirviendo, reduce el fuego a medio-bajo y deja que los frijoles se cocinen a fuego lento.
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4. Aromatizantes:
Después de 30 minutos de cocción, agrega la cebolla picada, los dientes de ajo y las hojas de laurel. Estos ingredientes añadirán sabor a los frijoles mientras se cocinan.
5. Cocción lenta:
-Cocina los frijoles a fuego lento durante 1.5 a 2 horas, o hasta que estén tiernos. Revísalos de vez en cuando y agrega más agua si es necesario para mantener los frijoles cubiertos.
6. Sal y finalización:
Una vez que los frijoles estén suaves, agrega sal al gusto. Evita añadir sal al principio, ya que puede endurecer los frijoles durante la cocción.
Si deseas, puedes añadir un poco de aceite de oliva para darle un toque extra de sabor.
7. Servir:
Retira las hojas de laurel y sirve los frijoles calientes. Puedes acompañarlos con arroz, tortillas, o usarlos como base para otras recetas.
Consejos
Alternativa rápida: Si olvidas remojar los frijoles, puedes usar el método de remojo rápido: hierve los frijoles en agua durante 2 minutos, luego retíralos del fuego y déjalos reposar durante 1 hora antes de continuar con la cocción.
Variaciones: Experimenta con diferentes especias y hierbas como comino, cilantro, o pimentón para darle un toque único a tus frijoles.
Preparar frijoles sin olla a presión puede llevar más tiempo, pero el resultado vale la pena. Con esta guía, podrás disfrutar de frijoles caseros y deliciosos sin necesidad de equipo especial.
Beneficios de Comer Frijoles
Incorporar frijoles en su dieta diaria puede ofrecerle una amplia gama de beneficios para la salud. Este alimento es una excelente fuente de fibra dietética, crucial para mantener un sistema digestivo saludable. La fibra ayuda a prevenir el estreñimiento y puede reducir el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes y el cáncer de colon.
Además, los frijoles son ricos en proteínas vegetales de alta calidad, convirtiéndose en una alternativa saludable a las proteínas de origen animal. Esto es especialmente beneficioso para personas vegetarianas o veganas, ya que les proporciona una fuente adecuada de proteínas sin necesidad de consumir productos de origen animal.
Otro punto a favor de los frijoles es que son bajos en grasa y no contienen colesterol. Su bajo contenido de grasa saturada los hace ideales para mantener un corazón sano y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Los frijoles también aportan una gran variedad de vitaminas y minerales esenciales para el buen funcionamiento del organismo. Son ricos en vitaminas del complejo B, hierro, zinc, folato y magnesio, todos nutrientes importantes que contribuyen a una salud óptima.
Además, debido a su alto contenido de fibra y proteínas, los frijoles promueven la sensación de saciedad y ayudan a regular el apetito, facilitando el control del peso corporal.