La Alcaldía de Bogotá tomó la decisión de no apoyar al gobierno nacional en la reubicación de la comunidad embera que llegó recientemente a la ciudad, en busca de soluciones a la situación que enfrentan en sus territorios.
De acuerdo con fuentes de la Alcaldía, el Distrito no participará en la coordinación de ninguna reubicación de los indígenas del Centro de Atención Nacional (CAN), tras indicar que el manejo de esta situación recae exclusivamente en el Gobierno Nacional, a través de la Agencia Nacional de Tierras (ANT).
La situación actual es compleja, ya que los indígenas embera han activado un cerco en la ANT, reteniendo a unas 50 personas, incluidos varios funcionarios del circuito judicial y generado un ambiente de tensión.
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Marcos Guasarabe, consejero mayor de la comunidad embera, indicó que más de 400 niños pasaron la noche en condiciones difíciles a las afueras de la agencia, donde la comunidad permanece asentada a la espera de una reunión con representantes del Gobierno.
Cabe recordar que más de 4.000 indígenas llegaron el pasado lunes a la ANT en Bogotá, demandando soluciones urgentes en áreas críticas como salud, educación y alimentación. Guasarabe hizo un llamado alarmante sobre la situación de desnutrición en la comunidad, revelando que más de 30 niños han fallecido en el departamento de Risaralda solo este año a causa de esta crisis.
“Le estamos exigiendo al Gobierno que se haga presente al llamado que le hace la minga indígena del departamento de Risaralda”, afirmó el consejero, quien destacó la importancia de abordar las necesidades de la comunidad.
Entre las principales demandas se encuentran el acceso a tierras, así como garantías en salud, educación y proyectos productivos.
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La comunidad emberá expresó su desesperación ante la falta de respuestas y el aparente abandono por parte del Estado. Guasarabe señaló que en 2023, 78 niños murieron por desnutrición y enfermedades relacionadas y en lo que va de 2024 ya han sido reportados 32 casos similares.
”Nos sentimos engañados por ellos”, manifestó, resaltando la percepción de incumplimiento por parte de los distintos ministerios que han llegado a los departamentos.