
A casi un año de la medida de racionamiento de agua en Bogotá y 11 municipios de la Sabana, decretada por el alcalde Carlos Fernando Galán, la crisis hídrica sigue sin resolverse. Los embalses del sistema Chingaza continúan en niveles críticos, con solo 38.95% de capacidad, lejos del 70% necesario para levantar la restricción.
Ante este panorama, el Gobierno Nacional ha anunciado una resolución clave que busca proteger los humedales y embalses de la región, en un esfuerzo por garantizar el abastecimiento de agua y mitigar el impacto del cambio climático.
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Medidas para enfrentar la crisis hídrica
La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, aseguró que los nuevos lineamientos ambientales buscan recuperar la capacidad hídrica de la Sabana de Bogotá, evitando el agotamiento de los embalses y asegurando un desarrollo urbano sostenible.
“El Ministerio de Ambiente tiene la competencia para definir determinaciones ambientales sobre la Sabana, ya que fue declarada ecosistema de interés nacional por la Ley 99 de 1993. No podemos ignorar que llevamos un año de racionamiento de agua y seguir con el desarrollo urbano como si nada estuviera pasando”, explicó Muhamad.
La funcionaria también desmintió que la resolución vaya a frenar las obras en Bogotá, como ha señalado el alcalde Carlos Fernando Galán. Según Muhamad, la medida no impide el desarrollo, sino que busca proteger suelos fértiles, fuentes de agua y bosques, garantizando una mejor regulación hídrica en la región.
¿Qué dicen los críticos de la medida?
El anuncio del Gobierno ha generado reacciones encontradas. La senadora María José Pizarro aseguró que la crisis hídrica se ha agravado debido a una expansión urbana descontrolada, que ha puesto en riesgo la disponibilidad de agua en Bogotá.
“Antes, la ciudad se abastecía en un 70% con aguas de Chingaza, pero hoy ese porcentaje ha caído por debajo del 50%. El problema es estructural, y no se puede seguir ocultando que el embalse de Chuza se está secando”, señaló Pizarro.
La senadora también criticó a la administración distrital y a exalcaldes como Claudia López y Enrique Peñalosa, asegurando que su modelo de desarrollo ha puesto en peligro los recursos hídricos.
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¿Qué sigue para Bogotá?
La resolución del Ministerio de Ambiente busca regular la expansión urbana y proteger las fuentes de agua en la Sabana, con el objetivo de evitar una crisis mayor. Sin embargo, el debate sigue abierto entre el Distrito y el Gobierno Nacional sobre la mejor estrategia para enfrentar el racionamiento y garantizar el suministro de agua a largo plazo.
Mientras tanto, los ciudadanos siguen a la espera de soluciones efectivas que les permitan volver a una normalidad en el acceso al agua.
.@CarlosFGalan critica la resolución de @MinAmbienteCo, pero le esconde a Bogotá que el Embalse de Chuza en Chingaza se está secando. Lo hace entre otras para esconder también las responsabilidades de Claudia López y Enrique Peñaloza. Los 3 son lo mismo.
Antes la ciudad se… pic.twitter.com/2jqs0SP4Qo
— María José Pizarro Rodríguez (@PizarroMariaJo) March 5, 2025
El debate sobre los lineamientos ambientales de la Sabana debe darse con rigor y sin desinformación. No frenan el desarrollo ni detienen obras, su propósito es claro: proteger el agua, los suelos fértiles y los ecosistemas estratégicos.@Bogota lleva un año en racionamiento y la… pic.twitter.com/BoOWsOgfSm
— Susana Muhamad (@susanamuhamad) March 5, 2025