Se acabó la pesadilla: Proyecto que acabaría con los trancones en la Calle 13 y 80 iniciaría pronto

El Regiotram de Occidente, una luz de esperanza para la movilidad en la región, enfrenta un importante hito en su camino hacia la realización: la obtención de la licencia ambiental. Este proyecto, tan esperado por los ciudadanos de Bogotá y sus alrededores, promete no solo mejorar la movilidad en las vitales vías de la calle 13 y la calle 80, sino también transformar la calidad de vida de más de 130.000 personas que se desplazan diariamente desde los municipios de la Sabana de Bogotá.

La necesidad de este proyecto es evidente: actualmente, un viaje que debería durar 50 minutos se extiende hasta las dos horas, un tiempo que impacta negativamente tanto en la economía como en el bienestar de quienes lo experimentan. El Regiotram de Occidente no solo acortará los tiempos de viaje, sino que también reducirá costos, al integrarse con el metro y el sistema TransMilenio para un desplazamiento más eficiente por la ciudad.

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Sin embargo, el proyecto se encuentra en una encrucijada debido a la falta de la licencia ambiental. La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) ha destacado la falta de información integral para evaluar adecuadamente los posibles impactos en los humedales Capellanía y Gualí, lo que ha llevado al estancamiento del proceso.

La pregunta que pesa en la mente de muchos es: ¿cuándo se llevará a cabo la audiencia pública para la aprobación de la licencia ambiental? Se espera que este crucial evento se realice en el primer trimestre de 2024, un momento crucial que podría definir el destino del Regiotram de Occidente.

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A pesar de los desafíos, el proyecto ha logrado avanzar significativamente, con un progreso del 27%. Sin embargo, la ausencia de la licencia ambiental plantea la posibilidad de retrasos en su ejecución. No obstante, el gerente del proyecto ha manifestado su compromiso al anunciar una inversión de 438.000 millones de pesos y ha explorado la posibilidad de continuar con algunas obras sin la licencia, implementando estrategias para mitigar cualquier impacto negativo.

El Regiotram de Occidente representa una oportunidad única para transformar la movilidad y mejorar la calidad de vida de miles de personas. La realización de la audiencia pública marcará un hito crucial en su camino hacia la concreción, y todos los ojos están puestos en este importante paso para el futuro de la región.