Rey se adelanta a Galán y evitaría Racionamiento de agua en los municipios

Han transcurrido nueve meses desde que el alcalde Carlos Fernando Galán implementó medidas de racionamiento de agua debido a los bajos niveles de los embalses del sistema Chingaza, esenciales para el abastecimiento del 70% del agua en Bogotá y once municipios de la Sabana.

De acuerdo con los reportes más recientes de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB), el consumo de agua en Bogotá y sus alrededores alcanzó los 16.27 metros cúbicos por segundo. Al 13 de enero de 2025, los embalses del sistema Chingaza registran una capacidad del 45.59%, lo que representa una reducción de 610,000 m3.

En este contexto crítico, el gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey, ha anunciado la creación del Acueducto Regional de la Sabana, un proyecto que busca reducir la dependencia de los embalses de Chingaza y garantizar el suministro de agua a municipios como Cajicá, Chía, Cota, Funza, Gachancipá, La Calera, Madrid, Mosquera, Soacha, Sopó, Tocancipá y Cojardín.

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Un proyecto con miras al futuro

Con los recursos asegurados y a la espera de aprobaciones finales, se prevé que el Acueducto Regional entre en operación antes de finales de 2027. “La crisis actual de abastecimiento de agua en Bogotá y algunos municipios de la Sabana ha generado una reflexión sobre la necesidad de buscar fuentes alternativas hídricas”, señaló Rey. “Por ello, hemos firmado un convenio con la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) para explorar el recurso hídrico subteráneo. Estudios recientes de la Universidad Nacional y el Instituto de Hidrología advierten que las fuentes tradicionales podrían no ser suficientes para abastecer la Sabana a partir de 2030”.

Acciones concretas para enfrentar la crisis

El convenio firmado con la CAR contempla la realización de estudios hidrológicos y la perforación de al menos 10 pozos profundos en la Sabana. Estas acciones podrían incrementar el suministro actual de agua en un 170%, reduciendo así la presión sobre los embalses que tradicionalmente han sostenido el abastecimiento de la región.

Además de los pozos, el proyecto incluye:

• Adquisición de predios en áreas ambientalmente estratégicas.

• Reforestación con un millón y medio de árboles durante el cuatrienio.

• Implementación del programa de pago por servicios ambientales, destinado a preservar las fuentes hídricas clave de Cundinamarca.

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Estas medidas no solo buscan mitigar la crisis actual, sino también garantizar el acceso sostenible al agua para las generaciones futuras. La iniciativa del gobernador Rey marca un paso adelante en la gestión de los recursos hídricos, reafirmando la importancia de la colaboración interinstitucional para enfrentar retos ambientales complejos.

Con la implementación de estas estrategias, Cundinamarca podría convertirse en un referente de sostenibilidad hídrica para otras regiones del país, demostrando que es posible superar las crisis con planificación y acción.