Se les aguó la fiesta: vecinos ruidosos tendrán que bajarse de una platica larga

El vivir en una propiedad horizontal le permite gozar a los residentes de varios beneficios como el tema de seguridad y el disfrutar de áreas comunes. Sin embargo, no todo es color de rosa, pues a diario llegan denuncian a las líneas de la Policía por el exceso de ruido que generan algunos vecinos. 

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Estas incómodas situaciones son más comunes de lo que parece, por ello dentro del Código de Policía se determinaron variar medidas que se pueden tomar para solucionar el problema de raíz. 

Inicialmente, se debe generar un diálogo asertivo con el implicado exponiéndole los motivos por las cuales el ruido afecta a la comunidad y así llegar a un acuerdo verbal. 

En caso de que persista con la música a todo volumen, gritos, ruido con objetos, entre otros; se debe contactar directamente a la junta de acción comunal o a la administración del conjunto residencial. Ellos se deberán encargarse mediante llamados de atención o sanciones económicas por desobedecer el manual de convivencia el caso. 

Si bajo dichas acotaciones tampoco se logra una concertación, se puede acudir al CAI más cercano a denunciar el caso. Según explicó el artículo 33 del Código Nacional de Policía, los ciudadanos que comentan en este tipo de actos recibirá una multa general tipo 3, la cual equivale a 16 salarios mínimos diarios legales vigentes, es decir 618.656 pesos en 2023. 

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“Sonidos o ruidos en actividades, fiestas, reuniones o eventos similares que afectan la convivencia del vecindario, causando molestia por su impacto auditivo, en cuyo caso podrán las autoridades de policía desactivar temporalmente la fuente del ruido, en caso de que el residente se niegue a desactivarlo”, explica el artículo.

Así las cosas, las personas que estén inconformes con el actuar de sus vecinos podrán regirse a la ley para velar que se cumplan las normas básicas de convivencia al pie de la letra.