Figuró bajarle al chorro: revelan nuevos topes de consumo de agua en Bogotá
Para enfrentar la escasez de agua, la Comisión de Regulación de Agua Potable y Saneamiento Básico (CRA) ha propuesto un nuevo plan que limita el consumo para usuarios residenciales y del sector público en Colombia. Este ajuste busca regular los niveles de consumo, especialmente en ciudades grandes como Bogotá, donde la crisis hídrica se agudiza cada día. Según el borrador del proyecto, los topes de consumo se clasificarán en función de la ubicación geográfica y la altitud de las ciudades.
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¿Cuáles son los topes de consumo para usuarios residenciales?
La propuesta establece límites específicos de consumo según la ubicación geográfica y el estrato socioeconómico de los hogares. Para ciudades situadas a más de 2,000 metros sobre el nivel del mar, como Bogotá, Tunja y Pasto, se sugiere un límite mensual de 12 metros cúbicos para los estratos 1 al 4, y de 10 metros cúbicos para los estratos 5 y 6. Este cambio es significativo en comparación con el límite actual de 22 metros cúbicos para todos los estratos y busca incentivar el ahorro de agua.
En ciudades ubicadas entre 1,000 y 2,000 metros sobre el nivel del mar, como Medellín, Cali y Bucaramanga, el límite de consumo será de 13 metros cúbicos para los estratos 1 al 4 y de 11 metros cúbicos para los estratos 5 y 6. Por otro lado, en ciudades situadas a menos de 1,000 metros sobre el nivel del mar, como Barranquilla, Santa Marta y Cartagena, el límite será de 15 metros cúbicos para los estratos 1 al 4 y de 13 metros cúbicos para los estratos más altos.
Nuevos límites para el sector productivo
La regulación también afectará a usuarios no residenciales, como comercios, industrias y el sector público, quienes hasta ahora han tenido mayor libertad en su consumo. La propuesta establece que estos sectores deberán ajustarse a un “consumo objetivo” del 90% del promedio de su consumo registrado en el último año, con el fin de que también contribuyan al ahorro de agua.
Esta medida obligará a las empresas prestadoras de servicios a desarrollar campañas educativas, buscando informar a los usuarios y reducir el impacto del consumo en las fuentes hídricas, que están cada vez más comprometidas.
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La crisis hídrica en Bogotá sigue generando preocupación
En Bogotá, la situación es cada vez más preocupante debido a los bajos niveles de los embalses. Según datos de la Alcaldía, el embalse de Chingaza, que abastece alrededor del 70% del agua de la ciudad, se encuentra solo al 44.34% de su capacidad. A pesar de las lluvias en diversas regiones del país, estas no han sido suficientes para revertir el riesgo de escasez.
El consumo promedio en la ciudad alcanza los 15.96 metros cúbicos por segundo, lo que ejerce una presión constante sobre las reservas. Las autoridades instan a los ciudadanos a reducir el consumo a través de prácticas simples, como reutilizar el agua de la lavadora para el inodoro, usar un vaso de agua para cepillarse los dientes o evitar el uso de mangueras para el lavado de vehículos.