Galán tomó drástica decisión en contra de los vándalos: hará cambios en puentes

La inseguridad en Bogotá sigue siendo un problema crítico, afectando no solo a la ciudadanía, sino también a las obras públicas del Distrito, lo que genera millonarias pérdidas económicas. Un ejemplo recurrente es el robo constante de las láminas de aluminio en los puentes peatonales, una problemática que compromete la seguridad de los peatones y representa un alto costo para la administración.

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Entre el 1 de enero y el 30 de junio de 2022, se reportaron actos vandálicos en 32 puentes peatonales de la ciudad. Las localidades más afectadas fueron Mártires, Puente Aranda, Teusaquillo y Barrios Unidos. Durante este período, el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) tuvo que reemplazar 480 láminas de aluminio, equivalentes a 128,5 m² de superficie, con un costo aproximado de $1.350.000 por metro cuadrado. Esto significó una inversión total de $3.872 millones solo en reparaciones de puentes ese año.

Una solución más resistente y menos atractiva para los ladrones

Ante la gravedad de la situación, el IDU tomó medidas drásticas para mitigar el impacto del vandalismo. El primer puente intervenido en 2024 fue el ubicado en la Autopista Norte con Calle 166. Allí, las láminas de aluminio fueron reemplazadas por un sistema más robusto y resistente: pisos de polipropileno.

Este material ofrece múltiples ventajas: es menos atractivo para los ladrones debido a su menor valor comercial, tiene una mayor durabilidad y garantiza una vida útil prolongada para las estructuras. Adicionalmente, se instalaron perímetros reforzados para aumentar la seguridad de los peatones y prevenir futuros robos.

Tres objetivos esenciales del IDU y el Distrito

Con esta estrategia, el IDU busca alcanzar tres metas principales:

1. Incrementar la seguridad de los peatones: Los nuevos pisos reducen el riesgo de accidentes derivados de daños estructurales.
2. Disminuir el robo de materiales: Al ser menos lucrativo, el polipropileno desincentiva el vandalismo.
3. Mejorar la durabilidad de los puentes: Este material es más resistente al desgaste y a las condiciones climáticas.

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Un plan a largo plazo

El IDU y el Distrito esperan que esta intervención sea el inicio de una estrategia integral para garantizar la seguridad y el mantenimiento de los puentes peatonales de Bogotá. Se priorizarán los puntos más críticos de la ciudad, brindando especial atención a las localidades más afectadas.

Esta iniciativa no solo pretende reducir los costos asociados al robo y vandalismo, sino también enviar un mensaje claro de que la seguridad y el bienestar de los ciudadanos son una prioridad para la administración. Con estas medidas, se espera que los bogotanos puedan transitar con mayor tranquilidad y confianza por las estructuras de la ciudad.